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La participación del farmacéutico en las áreas quirúrgicas ha consistido principalmente en proporcionar medicamentos para el stock del quirófano, asegurando las condiciones de almacenamiento adecuadas, comprobando las fechas de caducidad, controlando el gasto y manteniendo la contabilidad de las sustancias controladas. A principios de la década de 1980, los farmacéuticos reconocieron la necesidad de una mayor participación y comenzaron a aparecer las farmacias satélites de quirófano, especialmente en instituciones académicas. Aun así, la atención farmacéutica siguió centrándose en la distribución de medicamentos y el cumplimiento de la normativa vigente. 

En el momento actual, los cambios que se están produciendo en la asistencia sanitaria exigen que nuestra atención se dirija hacia la incorporación de actividades adicionales para colaborar con el resto del equipo quirúrgico y proporcionar una atención centrada en el paciente, mejorando los cuidados relacionados con la medicación en los entornos hospitalarios y ambulatorios.

El entorno perioperatorio

Para comprender y optimizar el papel único del farmacéutico quirúrgico, deben reconocerse las diferencias significativas que se encuentran en el entorno perioperatorio, concretamente las siguientes: 

  1. El proceso de uso de la medicación es diferente al de la unidad de hospitalización de pacientes, ya que no se dispensan los medicamentos de forma individualizada para cada paciente con prescripción médica y posterior validación farmacéutica.
  2. Los medicamentos son administrados por los anestesistas, cirujanos y enfermeros. 
  3. Una parte importante de los medicamentos son de alto riesgo.
  4. Los medicamentos pueden utilizarse para indicaciones no contempladas en la ficha técnica o administrada por vías con las que los farmacéuticos pueden no estar familiarizados. 
  5. Existen múltiples sistemas de documentación específicos en el entorno preoperatorio.

Funciones del Farmacéutico Quirúrgico:

Los servicios de gestión de la farmacoterapia que se prestan a todos los pacientes hospitalizados deben proporcionarse también, en la medida de lo posible, a los pacientes del área perioperatoria. 

Se describen dos niveles de atención farmacéutica en el entorno perioperatorio según las posibilidades de desarrollo en dicha área:   funciones básicas y avanzadas. 

FUNCIONES BÁSICAS DEL FARMACÉUTICO QUIRÚRGICO

1. Adquisición de medicamentos, preparación, distribución y flujo de la medicación

  • Conocer todos los medicamentos que se utilizan en el quirófano.
  • Informar y proponer alternativas en caso de escasez o falta de suministro de algún medicamento.
  • Garantizar la seguridad de la medicación dispensada de forma manual o automática.
  • Garantizar el acceso a la medicación de emergencia.
  • Limitar el acceso a los estupefacientes sólo a personas autorizadas.
  • Participar en la elaboración de una guía actualizada de administración de medicamentos.
  • Preparar medicamentos peligrosos.

2. Promoción del uso seguro de la medicación de acuerdo con la normativa y las políticas institucionales

  • Participar en estrategias de seguridad de la medicación*

3. Gestión y vigilancia de sustancias controladas

  • Controlar los estupefacientes dispensados a quirófano y notificar si se descubre alguna discrepancia.

4. Revisión de órdenes de la unidad de cuidados preoperatorios y postanestésicos (URPA)

  • Revisar prospectivamente las prescripciones de pacientes ingresados en la unidad. Establecer criterios de priorización de pacientes.
  • Seguimiento del paciente en la transición a la planta quirúrgica correspondiente.

5. Proporcionar información y educación sobre medicamentos

  • Informar proactivamente de necesidades conocidas.
  • Formar a otros farmacéuticos del servicio para poder resolver consultas las 24 h del día.

6. Mejora del rendimiento y garantía de calidad

  • Participar en comités interdisciplinares.
  • Participar en la elaboración de protocolos de medicamentos.
  • Evaluar el cumplimiento de los protocolos.

7. Funciones de liderazgo y servicio profesional

  • Asumir responsabilidad personal de liderazgo en el proceso de uso de la medicación.

8. Gestión económica

  • Gasto anual en medicamentos de la unidad
  • Valorar la inclusión de nuevos medicamentos

 

FUNCIONES AVANZADAS DEL FARMACÉUTICO QUIRÚRGICO

1. Medicación preoperatoria, conciliación de la medicación, transiciones asistenciales.

  • Revisar la historia farmacoterapéutica del paciente. 
  • Manejar la medicación crónica y conciliar la medicación adaptada al proceso quirúrgico.
  • Consulta de atención farmacéutica preoperatoria presencial o telefónica.

2. Participar en el pase de visita en URPA (Unidad de recuperación posanestésica)

  • Reducir los efectos adversos evitables de los medicamentos mediante la inclusión de la participación del farmacéutico en las rondas médicas, tanto en el entorno general como en los entornos de cuidados críticos.

3. Seguimiento farmacoterapéutico de los pacientes ingresados en URPA/planta

  • Validar la prescripción, monitorización farmacocinética, revisión de antimicrobianos, monitorización de anticoagulantes.

4. Seguimiento de pacientes al alta hospitalaria

  • Coordinación con el resto de los servicios para asegurar la medicación del paciente al alta
  • Consulta de atención farmacéutica postoperatoria telefónica al alta para realizar seguimiento de dolor, anticoagulación, etc.

5. Conocimientos de reanimación

  • Conocer los fármacos utilizados en la reanimación.
  • Emergencias en el quirófano: hipertermia maligna, toxicidad sistémica de anestésicos locales entre otros (control de kits de dantroleno y emulsión lipídica).

6. Educación

  • Formación especializada sobre el entorno del quirófano.
  • Medicamentos que se utilizan (medios de contraste, colorantes, soluciones de irrigación, etc.).

7. Investigación y otras actividades académicas

  • Participar en proyectos de investigación para mejorar la eficiencia, la seguridad del medicamento y mejora de la calidad asistencial.

8. Consideraciones para la inclusión en la Comisión de Farmacia y Terapéutica 

  • Participar en el desarrollo, implementación y el seguimiento de las directrices sobre los criterios de uso de la medicación cuando sea posible.

9. Iniciativas de calidad y seguridad

  • ·Estandarizar el almacenamiento de los medicamentos.
  • ·Implementar prácticas seguras de administración de medicamentos.

 

TIPOS MÁS COMUNES DE ERRORES DE MEDICACIÓN EN EL QUIRÓFANO

  • Dosis errónea como resultado de un mal cálculo de la dosis, la concentración o la velocidad de infusión
  • Fármaco erróneo debido a la administración accidental de la jeringa equivocada o de un vial o ampolla durante la preparación de la medicación
  • Dosis extra
  • Dosis omitida/falta de acción

 

Estrategias de seguridad de la medicación.

Seleccionar las estrategias de seguridad de la medicación en el quirófano incluye lo siguiente:

  • Almacenamiento de medicamentos: bandeja de medicamentos, carro de medicación u otro dispositivo.
  • Evitar isoapariencia en las distintas presentaciones de medicamentos.
  • Utilizar viales de un solo uso; no utilizar el mismo inyectable en varios pacientes. (Excepto si se redosifica en el servicio de farmacia)
  • Almacenar sólo una concentración de fármaco, si es inevitable tener dos concentraciones, separarlas.
  • Estandarizar el almacenamiento de medicamentos, etiquetar claramente las divisiones y colocar los medicamentos para minimizar la confusión.
  • Almacenar los fármacos de anestesia regional separados del resto de medicamentos. 
  • Identificar el lugar donde se almacena la medicación de alto riesgo.

Administración de medicamentos:

  • Etiquetar todos los medicamentos utilizando etiquetas preimpresas estandarizadas con código de colores por grupo terapéutico.
  • Priorizar el uso de jeringas precargadas y soluciones   preparadas “ready to use” cuando sea posible; si no es posible, utilizar medicamentos diluidos preparados por farmacia.
  • Doble chequeo de las preparaciones de medicamentos de alto riesgo.
  • Leer y verificar cada vial, ampolla, y etiqueta de la jeringa antes de administración.
  • Estandarizar la preparación de medicamentos, concentraciones, dosis máximas, para poder utilizar bombas para la administración
  • Estandarizar el código de colores específico de las vías (amarillo epidural, línea arterial roja), y etiquetar los extremos dístales de las líneas de infusión.
  • Pasar sólo un medicamento a la vez en el campo estéril; para todos los medicamentos, comprobar, etiquetar y verificar en voz alta por 2 personas; separar los fluidos tópicos o de irrigación (por ejemplo, no colocarlos en la jeringa para uso parenteral).
  • Asegurar un acceso venoso adecuado y la administración segura de magnesio y oxitocina durante el traslado al quirófano para un parto por cesárea de urgencia.

Farmacia:

  • Asignar un farmacéutico o farmacéuticos para apoyar al quirófano, disponible las 24 horas del día para preguntas, que participe en las actividades educativas y que reciba formación especializada sobre conceptos fundamentales del quirófano.
  • Abastecer y gestionar la medicación de anestesia y medicamentos de alto riesgo.
  • Alertar al personal, de los cambios en la forma de los medicamentos suministrados (por ejemplo, nuevas etiquetas o concentraciones). 
  • Proporcionar ayudas cognitivas, protocolos de rescate y tablas de gráficos de infusión.

 

MIRANDO AL FUTURO: RECUPERACIÓN INTENSIFICADA DESPUÉS DE LA CIRUGÍA

Con el equipo ERAS (Enhanced Recovery After Surgery), el farmacéutico quirúrgico puede participar en el desarrollo de protocolos, así como en la identificación y el cuidado de los pacientes que puedan tener un alto riesgo de reingreso. Los farmacéuticos pueden colaborar en la conciliación de la medicación en el momento del ingreso, identificando pacientes de alto riesgo, la polifarmacia, las interacciones entre enfermedades y medicamentos, y el dolor crónico, de difícil manejo en el postoperatorio. También puede hacer un seguimiento de la medicación al alta del paciente para responder a preguntas y revisar posibles duplicidades u omisiones de su medicación crónica.

 

CONCLUSIÓN

Los farmacéuticos responsables de los servicios del área quirúrgica deben conocer la práctica del quirófano, el proceso de uso de la medicación en el mismo y los medicamentos que son administrados en el entorno perioperatorio. Al utilizar sus conocimientos y trabajando de forma estrecha con el personal de quirófano (anestesistas, enfermeras y cirujanos), los farmacéuticos están bien posicionados para optimizar la medicación y la seguridad en el entorno perioperatorio. 

 

Bibliografía

Bickman P, Golembiewski J, Meyer T, Murray CG, Wagner D. ASHP guidelines on perioperative pharmacy services. Am J Healht-Syst Pharm. 2019:76(12):903-920.

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